EDITORIAL: María José Martínez, una gestión nefasta para Aranjuez
Con la dimisión de María José Martínez como Alcaldesa de Aranjuez finaliza la etapa más nefasta en gestión municipal que ha habido en la historia de nuestro municipio, una época que ha estado marcada por la arrogancia política. La ya exalcaldesa ha gobernado el municipio en dos etapas sin que haya más legado por su parte que el odio hacia el Partido Socialista y el insulto permanente hacia muchos de sus representantes municipales, a quienes les ha faltado al respeto, buscando siempre perjudicar y dañar la imagen de los concejales socialistas, judicializando incluso, y curiosamente en periodos de elecciones, asuntos que han quedado en nada, como era evidente.
Martínez se ha caracterizado en los nueve años en los que ha estado al frente del Gobierno municipal por su obsesión de destruir todo aquello que había creado el Partido Socialista, sin importarle lo más mínimo su ciudad. Aranjuez ha sufrido los desmanes de una alcaldesa a la que nada le han preocupado sus vecinos y vecinas, solo su interés por el menosprecio a infraestructuras y políticas puestas en marcha por los diferentes gobiernos progresistas que le han costado a nuestra ciudad millones de euros que ya no se pueden recuperar.
Tampoco le andan a la zaga los cuatro años en los que estuvo en la oposición, bloqueando cualquier iniciativa de gobierno, negándose a llegar a ningún acuerdo o consenso que propusiera el Partido Socialista para avanzar en asuntos importantes para la ciudad, algo que sí hizo el PSOE cuando propuso, en el inicio de la pandemia, mesas de negociación para llegar a acuerdos y beneficiar a la ciudadanía a través de los Fondos de Resiliencia del Gobierno de España.
Este Real Sitio no puede presumir ni alardear de un solo proyecto desarrollado por María José Martínez, pero sí puede hacer gala de una constante paralización que ha repercutido en el avance hacia el futuro de la ciudad. Su manera de enfundarse el bastón de mando por primera vez fue acusar al PSOE de robar ordenadores en la legislatura anterior, una de sus cientos de mentiras, como quedó demostrado, o de que desde Alcaldía se dispusiese de un coche oficial que, como recordarán, llegó a exhibir en la propia plaza del Ayuntamiento para ponerlo a la venta; un vehículo que, por cierto, ella misma ha estado utilizando hasta el último día para que la llevasen a la Asamblea de Madrid para realizar sus tareas como Diputada regional. Viajes que pagaban los ciudadanos ribereños para desempeñar labores que en nada competían a nuestro municipio.
Porque Martínez nunca ha querido a su ciudad, porque de ser así no hubiese estado durante días y días, meses y meses, rogando a sus compañeros del Gobierno regional que paralizasen todo proyecto que les llegase desde el Gobierno del Partido Socialista, hechos constatados y confirmados por miembros del Partido Popular en Madrid.
Aranjuez se ha visto en numerosas ocasiones detenida en su avance por los caprichos de quien ha gestionado esta ciudad entorpeciendo proyectos como el de Cabezadas, y el posible canal de remo, o el desarrollo del Raso de la Estrella, una inversión que supuso la modernización y el arreglo de una zona fundamental para nuestra ciudad y que como no pudo paralizar dejó que muriese en los años posteriores, significando un gasto para los vecinos y vecinas que ahora, como el mismo Partido Popular ha reconocido llevando a Pleno una propuesta, van a tener que volver a realizar.
También entorpeció y judicializó el Parking de la calle del Rey, consiguiendo que se cerrase y no recurriendo, cuando ya era Alcaldesa, una sentencia que se podía haber revocado sin ningún problema. Era un proyecto Socialista y Martínez tenía que destruirlo sin importarle que las arcas municipales sufrieses y que Aranjuez no dispusiese de un aparcamiento que, como ahora exige la Unión Europea en políticas de movilidad y sostenibilidad, es fundamental y obligatorio. Martínez siempre antepuso el no hacer nada antes que darle la razón al Partido Socialista, en un claro perjuicio a la ciudadanía.
Tampoco ha querido llevar a cabo la implantación de un Parador Nacional en la Casa Atarfe, un proyecto encarrilado por el Partido Socialista y que hubiese supuesto un crecimiento exponencial para la ciudad en pleno centro. Desde el Ministerio nos lo pusieron en bandeja de plata, sin ningún coste para el municipio, y la ex alcaldesa no quiso llevarlo a cabo. Esa decisión ha afectado de manera directa al desarrollo económico de la ciudad y ha supuesto que no se generen cientos de puestos de trabajo directos e indirectos.
Las políticas económicas han sido aún peores, con consecuencias terribles para esta ciudad. La exalcaldesa siempre intentó tapar una cruda realidad en su gestión, y mientras iba aumentando la deuda municipal trataba de responsabilizar al Partido Socialista, mentira tras mentira, de una situación que había generado ella, con sentencias perdidas y con impagos que supusieron intereses económicos contra la ciudad.
No hay que olvidar que Martínez llegó al sillón de la Alcaldía prometiendo la supresión de la tasa de la basura, -que van a tener que reponer en 2025 porque ya finaliza el plazo que daba Europa y pasa ser obligatoria-. Lo que no explicó en su programa electoral es que quitar esa tasa iba a suponer no pagar a la empresa adjudicataria, lo que provocó una deuda de cerca de 20 millones con los correspondientes intereses al que tuvo que hacer frente el PSOE, como también tuvo que hacerlo ante la sentencia por realizar contratos en fraude de ley y que supuso otro millón de euros para las arcas municipales.
María José Martínez, que no ha sido capaz de aprobar nada más que un presupuesto en cinco años, dejando dos contratos millonarios -limpieza y parques y jardines-, que no están haciendo cumplir, ha dejado una ciudad sucia, sin mantenimiento, sin inversiones y con la sanidad y la educación públicas muy deterioradas, porque nunca fue capaz de enfrentarse al Gobierno de Isabel Díaz Ayuso para defender los intereses de su municipio. La ex primera edil se ha marchado dejando Aranjuez sin profesionales médicos en las Urgencias extrahospitalarias y con más de 100 niños y niñas sin plaza en Bachillerato, pero dejando como Teniente de Alcalde a un concejal que ha provocado que el Ayuntamiento haya sido condenado, en dos ocasiones, por persecución a una trabajadora municipal, aunque sobre este asunto la exalcaldesa tiene ya experiencia; no obstante ya sufrió una condena por acoso a trabajadores municipales hasta “hacerles enfermar”.
Comienza ahora una nueva etapa, con un nuevo alcalde que ha formado parte como pieza indiscutible del Gobierno de María José Martínez. El talante puede que sea distinto pero también ha de ser diferente la gestión y la manera de afrontar los problemas del municipio porque, de lo contrario, será una continuación de las políticas de la peor Alcaldesa que ha pasado por el Real Sitio. Y no olvidemos que Martínez seguirá siendo Presidenta del Partido Popular en Aranjuez, por lo que seguirá manejando los hilos.
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